Fundición a presión

  • Características generales

    La fundición a presión es un proceso que permite obtener piezas de metal mediante la utilización de moldes reutilizables, llamados "dies".  En el proceso de la fundición a presión se necesita un horno, metal, una máquina de fundición a presión, un molde y todo el equipamiento necesario para mantener todos ellos a la temperatura correcta.   El metal, normalmente una aleación de metales no ferrosos como aluminio, zinc, magnesio o cobre, se funde en el horno y después se inyecta en los moldes de la máquina de fundición a presión.  En el inicio del ciclo, los moldes tienen que calentarse a la temperatura adecuada para el proceso de fusión, normalmente alrededor de los 200ºC.

    A medida que el proceso se realiza, las aleaciones fundidas pueden alcanzar una temperatura de hasta 700ºC que calentarán la matriz.

    Si la temperatura del molde no es la correcta, tanto en el calentamiento inicial como en la fase de enfriamiento, pueder surgir problemas tales como rotura, daño o mal funcionamiento del producto acabado.

    Para mantener el molde siempre a la temperatura adecuada se utilizan distintas Unidades de Control de Temperatura (TCU'S).